01 febrero 2010

Ojo por ojo ... Golpe por golpe

T.I. 2010 - ZONA 77
En cancha de Defensores del Carmen, Boxing derrotó por la minima diferencia a los dirigidos por “Peneca” Muñoz. Mariano Matus a ocho del final selló la suerte del “Defe”, en un partido que tuvo un primer tiempo demasiado duro, muy áspero, donde la pierna fuerte prevaleció antes que el juego. Y una complementaria tan pobre que llegó hasta el bostezo. Tres expulsados en un partido donde la promesa del futbol quedó para otro momento. Franco Sandoval fue la excepción pero no pudo contagiar al resto.
Alfredo Galvez

Es el plato fuerte de la fecha. Boxing liderando la zona, visita a Defensores, que junto al albiverde exponen el rotulo de invictos en el torneo. Pero si bien es cierto de que los números, fríos como siempre, mandan, el presente de ambos va por carriles distintos. Boxing, no solo es puntero, sino que viene de menor a mayor. Tras un triunfo de visitante en la primera fecha frente a Ferro, ante un carbonero, que al menos fue merecedor de un empate. Tuvo su mejor actuación en la segunda, donde apabulló a Sportivo Santa Cruz, en una tarde perfecta. Defensores rescató un empate en Puerto Santa Cruz, y ante Ferro por la segunda fecha, en una tarde horrible por el viento, se quedó con un triunfo ajustado de dos a uno ante un carbonero, que nuevamente mereció mejor suerte. Visto de ante mano, Boxing, futbolísticamente viene mejor, pero esto es fútbol, y si encima le adicionamos que cada choque entre ambos se ha tornado casi un clásico…vale la pena estar aquí para ver este choque…para ver buen fútbol.Don Eduardo Ramón Lugo, de vuelta por estos pagos luego de disfrutar por tierras cordobesas de unas vacaciones en familia, minutos después de las dieciocho pitaba el inicio del encuentro. Y en la previa, allí en campo de juego, comentaba por radio, el agrado que le daba, esto de dirigir este encuentro, porque él, igual que todos los presentes palpitábamos un gran encuentro. Pero lejos estuvo Don Eduardo de acertarle en su pronostico, se equivocó él, yo, y todos los que estábamos en el “Nido de las Águilas”.

Movió Defensores y el pelotazo largo de Medina en busca de D´Augero que contenía el guardameta Garay, sumado a un intento de réplica inmediata por parte de Boxing en busca de Matus, daba crédito que estábamos ante un partido de alto vuelo. Pero fue solo un espejismo. Minuto cinco, pelotazo largo para que D´Augero presione en el área, el Vikingo que con un empujón se lo lleva “puesto” a Surita, Mario que cae, Lugo que sanciona falta en ataque, pero el choque deja esquirlas, en uno y otro, ya sin pelota hay golpes de ambos, sí, de ambos, quizás el del Mariscal Surita, fue más “tímido” pero no se quedó atrás. Tumulto, empujones, Surita yace en el suelo por la agresión, mirando de reojo que decisión toma Don Eduardo. La roja directa en mano de Lugo para con D´Augero, no merece ni siquiera intento de discusión, es clara y correcta. Pero sinceramente creo que el mismo camino debió seguir Surita. El “Negro” es el primer amonestado, de una lista casi interminable a lo largo del encuentro. Pero la culpa no pasaba por el árbitro, por el contrario, TODOS, absolutamente todos, hacían lo imposible por ganarse una. Parecía como en la calesita, que todos quieren agarrar la “sortija”, bueno, acá todos pretendían ganarse un cartón amarillo. Y Lugo, casi a pedido de los protagonistas, le fue dando el gusto a cada uno.
Medina lo atendía al Buitre, cada vez que podía, al tucumano le “daba” Amado, a este le respondía Oliva o Valiente, según por donde pasara. Basán, volteaba casacas negras y rojas y después levantaba ambas manos como diciendo “Yo no fui”. Simoes salía como refuerzo a espaldas de Aguilar en busca de Escobar y Clavel desparramaba a Matus y que la inocencia te valga. La pelota podía pasar… el hombre no. Un libreto casi calcado para ambos. Territorialmente Boxing, estaba mejor plantado, con un Matus que cada vez que se lo proponía, y si no lo volteaba antes, jugaba casi de “pivot” intentando habilitar especialmente al Buitre, fue justamente una jugada entre ambos, que le permite a Gargaglione, entrar al área perfilado para su mejor pierna, la derecha. La salida de Gómez en el afán de cortar, no impide que Rubén la pique por sobre la salida del uno local, pero la caprichosa, recorre el rectángulo menor, y pasa dando besos al caño izquierdo de Maxi Gómez. La más clara de Boxing. Tan clara como la chance para Defensores ahogada magistralmente por un Garay, que cada vez ataja mejor, su estirada casi elástica apoyada en su mano derecha que evita la caída de su arco mandándola al corner. Después poco y nada, foul y más foul. La excepción la marcaba Sandoval, casi como un bálsamo de frescura, de su zurda, partían las mejores combinaciones, los mejores toques del albiverde, pero aunque Franco pedía a gritos contagio, el resto no se daba por enterado, todo el resto de los protagonistas estaban dedicados al juego de la perinola, ese de TODOS PONEN!!!.
Abel Simoes ya había sido amonestado a su propio pedido, por esa eterna manía que tienen muchos de protestar y protestar, entonces, si estas condicionado y vas fuerte como para que te amonesten, obliga a la roja por doble amarilla. Y ahora van diez por diez, y Don Eduardo marca cuatro de alargue, y cerca de la banca de Defensores, buscan una pelota Oliva y el Gaby Burgos. Gabriel le aparece por la izquierda a Oliva, el capitán va con la misma vehemencia que el once albiverde, brazos abiertos el choque con el codo de Oliva no se hace esperar… Burgos cae, cuando gira veo sangre en su rostro. Don Lugo viene desde atrás no creo pueda ver el impacto, pero si me apuran, les digo que no veo la intención de lastimar al rival por parte del capitán local, pero el golpe existe, de eso no me caben dudas. La pulpería que se abre para que los guapos traten de copar la parada, empujones, amenazas verbales, etc. etc., etc. Y don Lugo determina final de una etapa más parecida a un partido de Rugby que a uno de fútbol (Aunque en el rugby son más leales)
Mientras camino para estirar las piernas, pienso lo que puede venir. Me imagino pase de facturas, “vendetas” de unos y otros y hasta apuesto al que se ponga que hay por lo menos dos o tres expulsados más. Pero no, lejos estuve de acertar (Como siempre bah!) el juego fuerte, la pierna desleal, pasaron (Gracias a Dios) a segundo plano. Con el arranque de la complementaria, llegaba nuestro amigo el viento…. Casi la escusa perfecta para, al menos, echarle la culpa a alguien de que se pueda jugar mal…muy mal. Boxing y Defensores jugaron a no jugar. Lejos, lejísimos de las áreas, la pelota pasó inexorablemente a estar más fuera del campo, que dentro de los límites permitidos para el juego.
Parecía un pacto de caballeros de “no” agresión, y entonces el partido entró en un bache, en una monotonía extremadamente aburrida. Donde la elegancia del juego, que uno sabe de antemano es el mejor exponente de muchos de los que quedaban en campo se vio superada por una “ordinariez” compartida por ambos. Los cambios de Muñoz y Giacomole poco aportaron al juego. Tácticamente, el dibujo de Boxing en esta segunda parte con la lesión de Burgos y la expulsión de Simoes tuvo que cambiar. Entonces Matus se plantó decididamente por izquierda, casi como volanteando por el lugar que dejó vacante Sandoval, porque ahora Franco se plantaba varios metros más atrás, como para cubrir el hueco dejado por Abel. Gargaglione ya definido como centro atacante era fácil presa de los centrales Matías Clavel y Ricardo Rodríguez. Lucas Fernández, se mostraba como salida pero simplemente se limitaba a pelotazos cruzados, no se proyectaba por izquierda. Por Boxing lo mismo ocurría con el “Colo” Reinoso, más preocupado en la marca que en intentar sorprender por derecha.
Escobar se debatía contra toda la defensa albiverde, pero nunca, jamás, pudo doblegar la impecable marca de Surita, el “Negro” iba bien de arriba y mejor aún de abajo, limpiando todo en el fondo. Haro comenzó a declinar su labor promediando la etapa y se fue diluyendo hasta que fue reemplazado por Chávez. Cuando todo daba para la firma del empate en cero, encontró en Sandoval y Matus dos “rebeldes” que no estaban de acuerdo en firmar nada. Minuto treinta y siete. Franco toma la bocha, en su terreno esta vez volcado por derecha se corre en dos trancos hasta el medio campo, siempre en Cmpo de Boxing, como un clásico numero cinco de su zurda, parte un disparo exacto a la diagonal que ya ha dibujado Matus, que va desde el centro hacia su derecha. Mariano, sorprende, gana y va por el callejón que queda entre Fernández y Rodríguez. Ya está en el área y sabe que de tocarlo es penal, por eso va confiado, allí, en zona caliente es donde más disfruta, donde generalmente es mortal. Gómez esboza una salida, simplemente para quedar en el camino, porque la derecha de Mariano Elías ya le dio el golpe, seco, preciso y certero a la caprichosa para que dibuje un sombrero por sobre la humanidad del uno de Defensores. El grito no se hace esperar… un malón de casacas albiverdes se abalanzan sobre el goleador. A ocho del final, Defensores está herido de muerte.
Va con lo que tiene y con lo que puede sobre las “barbas” de Garay, pero Claudio demuestra que está en uno de sus mejores momentos, y el malón de casacas rojas negras y blancas choca con la seguridad del arquero visitante. Oliva deja su capitanía a Valiente, porque correctamente y por “golpe” sin pelota Lugo le muestra la roja por “atender” a un defensa boxinguista. Diez contra nueve, lo que no hicieron en ochenta y pico de minutos intentan corregirlo en un puñado de segundos. Imposible revertirlo, el pitazo de Eduardo Lugo desata el festejo de todo el ABC. La suma de puntos es perfecta, de nueve en juego, se ha conseguido igual número…. Como no festejar entonces, si se ha vencido a uno de los más serios candidatos de la zona. Defensores se va masticando bronca y es entendible. Dentro de tres fechas se verán las caras nuevamente en cancha del albiverde, ojalá por ese entonces, los dos hagan lo que mejor saben… jugar al fútbol, porque hoy… la fuerza superó al fútbol. Hoy fue simplemente… ojo por ojo..Golpe por golpe.