FILIAL EL CALAFATE
El Club venció 1 a 0 a Juveniles y obtuvo el primer chico en la gran final del futbol calafateño. Lago Argentino fue muy superior en el primer tiempo y ahí justificó la diferencia, con un tanto de Gustavo Acosta, una de las figuras del partido. En el segundo tiempo Juveniles mejoró su rendimiento y tuvo el empate en un penal que Bertolina desperdició “picándola” por arriba del travesaño. Hubo tres expulsados, dos del Lago y uno de la CAJ.
Vasco Perret
Todos corren a abrazar a Acosta, autor del único gol
Está claro que los dos se conocen mucho. Varios son amigos de toda la vida, han compartido muchas cosas juntos, y eso sin dudas, da la posibilidad de vivir una fiesta del fútbol, como la que vivimos el miércoles por la tarde en el Estadio Municipal “Héctor Pocho Gómez”, donde el Club Lago Argentino se llevó el primer partido final que define, quien es el campeón del fútbol de El Calafate 2009.
Los primeros minutos hubo imprecisiones de los dos lados, entregando la pelota al otro, y jugando lejos de los arcos. A partir de los 10 minutos, el Lago Argentino comenzó a desnivelar la cancha hacia la Calle Almirante Brown con un dominio que fue creciendo a medida que trascurría el primer tiempo. La seguidilla comenzó con un centro que cabeceo Raschdorf hacia el segundo palo, y esforzándose Bertolina la llegó a sacar al corner ante la entrada de Odriozola.
Comisión Atlético Juveniles sentía la falta de Walter Paz en el medio campo, por un tirón en su pierna derecha, y la falta de alguien que manejará la pelota, hiciera la pausa y se a el cerebro del equipo. Si a eso le sumamos, que Cabrera fue expulsado el domingo por la última fecha, también le faltaba explosión en los últimos metros.
El Club comenzaba hacer más que su rival, con la dupla Moya – Amado que cada vez están jugando mejor en el medio campo, Acosta dejando el surco por la izquierda, y el manejo de Contreras para cada ataque, con Benítez y Raschdorf en la delantera. Justamente Benítez sacó un remate que se fue rozando el palo derecho de Bertolina que solo atinó a acompañarlo con la vista.
Pero a los 17, otro centro peligroso al área de Juveniles, que le quedó a Raschdorf en la puerta del área, el “Colorado” sacó un remate fortísimo que Bertolina no pudo atrapar y dio rebote hacia delante. Allí estaba el veloz Acosta que no perdonó y en dos tiempos definió de cabeza para poner el 1 a 0. El Club era más y lo plasmaba en la red.
A partir de ese momento, todo fue del Club: el manejo del balón, la salida precisa por los laterales y las mejores posibilidades para seguir aumentando en el marcador. “Pero los goles hay que hacerlos, no merecerlos” dice un refrán, y eso le pasó al Club. Se equivoca Bórquez en la mitad de cancha, Chacón sale de contragolpe tirando un centro pasado al segundo palo, y el cabezazo de Benítez pega en el vértice de afuera de la red, y se pierde lo que era el segundo gol del partido.
A los 35 minutos, roba una pelota Acosta, que le da el pase a Benítez, éste habilita a Raschdorf en las espaldas de los defensores, y el delantero patea ante el achique del arquero Bertolina que en el mano a mano la sacó al corner.
En la segunda parte, Juveniles hizo méritos
Para el segundo tiempo, en Juveniles ingresó Melcom por Gallardo y con este cambio, Vera pasó a jugar en la mitad de la cancha junto a Bórquez, y ya en los primeros minutos, se notó que la falencia que tuvo en la primera mitad, no tener manejo de balón, comenzó a corregirla con ese cambio táctico. Lago Argentino esperó un poco más retrasado que en el primer tiempo y agazapado para aumentar, pero sus delanteros no tuvieron una buena tarde.
Así fue un pelotazo largo que le pica mal a Bartolina antes de rechazar con el pie, la dejo corta, Moya abrió hacia la derecha para Chacón que en vez de patear al arco, quiso tirar el centro, y regresando Bertolina a su arco, la sacó al corner, el Club siguió regalando chances de gol.
Para colmo, Juveniles se queda con 10, por expulsión de Borda que vio la segunda amarilla y se tuvo que ir a los vestuarios. Lago no supo aprovechar el hombre de más. A los 21, Odriozola es el que ve la segunda amarilla y ahora se quedan con diez.
A los 23, se escapa Arabel enfrentando a Molina, que lo toca abajo al delantero y Galarza sin dudar, cobra el penal para Juveniles. Bertolina fue el encargado de patearlo y queriendo picarla al centro del arco. Su remate se fue por arriba del travesaño, ante el delirio de La 14 (la hinchada del Lago) y el lamento de los jugadores de la CAJ.
En esta primera parte, de Juveniles se puede contar una sola llegada clara, y fue un remate de Arabel que se fue mansamente cerca del palo derecho de Molina. El Club, tuvo una más antes que terminará esa primera mitad, y fue después de un centro de Moya que Raschdorf se elevó en el área cabeceándola y acomodándola al palo izquierdo de Bertolina que solo miró como se estrellaba en el palo y el rebote le caía en sus manos. El Lago merecía, irse ganando por más diferencia.