BOCA RIO GALLEGOS 0 vs FERROCARRIL YCF 1
Boca con el “Romualdo D´Andrea” bajo el brazo, enfrentó a Ferrocarril YCF en cancha de Defensores. Santiago Rapalín presentó variantes en su alineación titular a fin de darles más rodaje a algunos muchachos. Ferro dominó todo el primer tiempo Echave y los palos salvaron a Boca. El xeneize mereció convertir en la segunda, Martín Cruz y los palos se lo impidieron. Cuando moría el partido Mascareño en una contra fulminante, puso el uno a cero para desatar la euforia carbonera, y dejar al campeón masticando bronca
Fotos: Romina Barrientos.
Un contraste totalmente distinto al de la semana anterior se ve reflejado en cuanto al público presente. Poca gente al menos para mi gusto.
A nadie sorprende el once titular que hoy presenta Don Santiago, que pone a Echave en el arco, tres en el fondo con Mussi, Correa y Lucas Fernández.
Mario Pérez, Jancich, Paco y Leandro Fernández en la zona media, suelto pero intercambiando de a ratos con “Lea”, va Mauro Rosales.
Y arriba de puntas, el “Negro” Rivera junto al retornado Rodríguez.
Los muchachos de Ludueña y Maldonado, con el quinceañero Cruz bajo los tres palos.
Cuatro en el fondo, que a la antigua y como a mi me gusta, utilizan los números según la posición que representan, esto de derecha a izquierda el cuatro, dos, seis y tres.
Asignados para Ojeda, Guerrero, Hoffman y Rondan.
La zona media con Seba Díaz, Cristian Vega el Piojo Arias y Lucas Calbucura.
Y los punta recaen en Cristian Arias y Mascareño.
Don Omar Lugo de fuerte rojo en su casaca minutos pasadas las tres de la tarde, pita arranque del partido con el saque que ordena Ferro.
Con el viento en su favor, pone el carbonero proa hacia Echave, esto es, en dirección al arco que tiene a sus espaldas la Autovía 17 de octubre.
Arias, el capitán, comienza a manejar los hilos en la zona media, y elije como referente de sus descargas a Mascareño por izquierda, y Calbucura que baja unos metros y se hace su cómplice preferido. Lucas ya lo conozco, es eléctrico, vivas y tiene en su gambeta la picardía del potrero que tanto se ha perdido. Vega muerde en el medio y la defensa se daba el gusto y “piachere” de plantarse casi en la zona central, porque este Boca pleno adjudicatario del torneo sin ser displicente ni mucho menos, lejos estaba de ser el que fecha a fecha pensaba en como arrimar peligro al arco rival.
El local peladísimo con la pelota, y Ferro con el respeto que merece el campeón, pero con la clara premisa de “Yo te quiero ganar”.
20 minutos, recibe el “piojo” Arias, en tres cuartos, zona de ataque, ligeramente volcado por izquierda, posición optima para meterle comba de derecha, y tal cual lo explico, tal cual es el tiro de Esteban, que supera a Echave, pero el travesaño dice “nones”,
Del rebote y para que sufra el hincha (Unos para que entre, otros para que no)vuelve el poste a negarle el gol al carbonero.
Boca estático, sin ideas, encima para demostrar por las claras que no andaba derecho, le pinta una contra fenomenal, va el Tigre, gana las espaldas de su marcador, por derecha pisa el área, encara al pibe Martín, que sin importarle que esta en mano a mano con uno de los máximos goleadores de nuestro fútbol, le pone el pecho a las balas, y le ahoga el grito de gol a Rodríguez, casi un presagio de lo que sería el principio del fin de Carlos, que se había ganado una amarilla apenas había comenzado el encuentro, y después, de la nada porque el partido no daba para eso, se excede en una protesta innecesaria, obligando a Lugo a girar sobre sus talones en mitad de cancha y mostrarle roja directa.
Se va la etapa con un sabor a poco para Ferro, porque había sido más, pero en el futbol, no te dan puntaje por eso. Y Boca en esta saca ventaja, porque por ser menos, tampoco te quitan puntos, asíque en definitiva las “pardas” venían bien.
La segunda mitad, ponía al campeón izando las velas, para que el viento por decantación y sumándole un poco de futbol y ganas lo lleve a las cercanías del pibe Cruz, que seguía empecinado en hacernos creer que el sol recae en Defensores, porque aun con la lluvia y el cielo plomizo, su gorra con visera formaba parte de su estilo.
Leandro Fernández, Rivera, Jancich y Paco, se hicieron dueño de la tarde y por ende de la pelota, y Boca desde el arranque se plantó en campo de Ferro.
Y lo que antes fue dominio de uno, ahora era exclusividad del otro.
Lucas Fernández, en línea recta de tiro libre, le saca esmalte, al vértice derecho de Cruz.
Los postes hacen fuerza común con el carbonero y le niegan el grito a Boca.
A Rivera y Rosales, se los para únicamente con infracciones, que sin ser violentas, joden, pero a don Omar esas pequeñas situaciones, no lo desacomodan ni mucho menos, porque no importa raza, credo ni religión amonesta a quien no quiera jugar, y así como en otras ocasiones, he marcado mi punto de vista en considerar exceso de amarillas, hoy comparto cada una de las cartulinas mostradas (La excepción recae para Jancich, en la primera parte que se comió una sin motivo) Este viene a cuento de que Ferro pierde a Rondan, por doble amarilla, y Ferro, que encima la pasaba mal ahora quedaba en cancha diez por diez.
Mascareño, de gran primer tiempo, fue casi imperceptible en el segundo, le dejó la posición en esta parte a Lucas Calbucura, que fue “borrado” por Mussi. Entonces Ferro se aferraba dignamente y con buenas armas al empate en cero. Escobar en la cancha da la fiel prueba que Boca quiere ganarlo. Otro par de situaciones hacen que Cruz y su defensa se auto confirmen en figuras. Santillán sobre la raya, después en igual situación Guerrero, son responsables directos que Boca no facture.
Minuto cuarenta y cinco, un hombre de Ferro caído en tres cuartos de cancha, “Pepe” Ludueña que gana metros, y se mete dentro del rectángulo, lo que me confirma que las canas que engalanan su cabellera no son “al pedo”, viejo zorro el hombre, sabe que cada minuto que se pierda es meter el partido en el freezer.
Boca en ataque, la redonda llega a las manos del pibe Cruz, Martín mete la contra con su pierna derecha, el campeón que fue al ataque, bajó la guardia, esta expuesto. La pelota llega a campo xeneize… Se acuerda de mi palabra “el imperceptible” Mascareño??? El recién ingresado Peicovich que resbala y pierde posición, Sebastián que encara, cambia el ritmo, el partido se muere, va contra el área y el enfrentamiento con Echave es inminente, lo mira, le apunta, esboza un “mano a mano hemos quedado” y parte su disparo, lo supera al bueno de Julio, y la corrida de Mascareño, con los brazos extendidos y la boca llena de gol, es imposible de describir.
Ya no hay tiempo de reacción para Boca, Lugo marca el final del partido, y Ferro festeja. Boca, mastica su bronca, sin dramatizar, obviamente porque el titulo ya esta asegurado. Ha perdido Boca, no se puede cargar tinta sobre esto, hoy el Campeón, simplemente se tomó licencia.