LIGA DE FÚTBOL NORTE - Caleta Olivia
En el marco de la última fecha del Torneo Apertura de la Liga de Fútbol Norte de Santa Cruz Catamarca se consagró campeón del torneo apertura al vencer por 3 tantos contra 1 a su similar de Mar del Plata. Los norteños sumaron una nueva estrella para su historia algo que lo venía buscando desde tiempo; ahora llegan al tiempo del festejo y de la mano del entrenador Ramón Reynoso llegaron a otro objetivo como es jugar el certamen del interior.
Los goles del campeón fueron anotados por Julio Martel, Oscar Ayala y Miguel Soto en tanto que el transitorio empate fue obra de Maximiliano Vera.
En el arranque del partido, Ariel Nievas fue una de las figuras importantes a la hora de hilvanar acciones de peligro en la mitad de la cancha bien acompañado por el Chato Ayala.
El planteo de Mar del Plata era claro, no descuidarse en el fondo y salir de manera rápida de tres cuartos de cancha hacia delante con Vera, Maldonado y el Chelo González como puntales.
Julio Martel hizo pesar su experiencia y desde sus ganas sacaba a su equipo para adelante, su trabajo fue bien secundado tanto por Pozas como con Claudio Figueroa a la hora de proyectarse.
La primera ocasión del partido tuvo lugar con un remate de media distancia de Ariel Nieva que controló sin problemas el arquero Jorge Cassarini.
El juvenil Zamora se mostraba como una salida permanente para Mar del Plata por el sector izquierdo merced a su velocidad que los agarraba a contrapié a sus defensores.
El partido se mostraba equilibrado donde los dos intentaban ser los dueños de la pelota. El primer gol llegó a los cinco minutos tras un tiro de esquina, la defensa del Lobo se quedó dormido, Cassarini no lo pudo retener y ni lerdo ni perezoso Julio Martel mandó la pelota al fondo de la red parar establecer la diferencia de 1 a 0 a favor del conjunto local.
Un duro golpe para Mar del Plata, que había realizado un buen planteo pero ante un descuido ya tenía un gol en contra.
El estadio Senador Almendra era una caldera, una verdadera fiesta de papelitos y banderas que festejaron sin parar la ventaja en el marcador.
Mar del Plata replicó con un tiro libre por vía aérea que no llevó mayor peligro ante el despeje de Julio Martel, sin dudas una de las figuras del cotejo.
Franco Carpio pedía la pelota continuamente para ser la salida del norteño y luego prolonga en Miguel Soto, un delantero con gran movilidad que rotaba por todo el frente del ataque.
Mar del Plata no encontraba la llave para abrir la defensa de Catamarca que se crecía con el correr de los minutos. La orden desde el banco del Lobo era no desesperarse y jugar a ras del piso buscando abrir la defensa por las bandas.
En el caso del local, el entrenador Reynoso indicaba a los volantes en tener mayor tiempo la pelota para no dejar crecer a Mar del Plata que poco a poco iba a arrimando peligro sobre la valla defendida por Claudio Manchot.
Al norteño le faltaba mayor profundidad y explotar mejor los espacios dejados por los volantes de Mar del Plata cuando estos pasaban al ataque. El Chelo González comenzó a tener mayor contacto con el balón y esto redundaba en que el Lobo tenga mayor volumen de juego de tres cuartos de cancha hacia delante.
La primera tarjeta amarilla fue para Gustavo Sotomayor debido a una fuerte entrada a Oscar Ayala. De la misma acción una jugada preparada para la entrada por sorpresa de Claudio Figueroa que no pudo darle buena dirección a la pelota y esta se perdió fuera.
Cada vez que Mar del Plata intentaba llegar por vía aérea, la defensa del local mostraba algunas desinteligencias y tal vez era una de las alternativas para “lastimar” del Lobo.
En ataque la respuesta de Catamarca no se hizo esperar con un remate del Chato Ayala que fue desviado al tiro de esquina. Walter Pozas trató de sorprender al arquero Cassarini con un remate de media distancia que se fue desviado.
Cada pelota se disputaba como si fuese la última y no era para menos se definía un nuevo campeonato oficial de la Liga de Fútbol Norte.
Mar del Plata tuvo una oportunidad con el cobro de un tiro libre, pero el remate de Juan Vera se fue completamente desviado sobre el arco norteño. En contrapartida, Germán Nievas solo de cabeza tuvo la chance de aumentar la ventaja en el tanteador y su envío se perdió fuera.
En este contexto Maximiliano Vera rompió la monotonía del partido con un zapatazo de media distancia que se coló en el ángulo izquierdo para decretar el empate para el Lobo a los 35 minutos del primer tiempo; el arquero Manchot no tuvo nada que hacer ante el magistral remate.
Con el empate el partido ganó en dinámica y esto le puso mayor “pimienta” al trámite. La hinchada “La 22” comenzó a alentar más fuerte al equipo local para que se pueda recomponer del golpe que significó la igualdad.
Catamarca estuvo cerca de desnivelar mediante un remate de tiro libre que tuvo a un brillante arquero Jorge Cassarini enviando la pelota al tiro de esquina.
El partido en líneas generales fue equilibrado y el resultado de empate con que se fueron al descanso ambos planteles resultaba justo.
Segundo Tiempo - En Mar del Plata ingresó Ibáñez en reemplazo de Maldonado que se tuvo que retirar lesionado, por el lado de Catamarca no hubo variantes presentadas por Ramón Crisanto Reynoso. Las órdenes desde el banco norteño eran claras: ser más vertical y profundo, en tanto que Mar del Plata mantenía la calma y aprovechaba el adelantamiento de los jugadores de Catamarca.
Alan Cortéz se erigió como uno de los puntales para Mar del Plata buscando recuperar los balones en la mitad de la cancha. Estaba claro que los norteños se jugaban enteros en pos de conseguir la victoria para poder ganar el bicampeonato.
Los volantes se multiplicaban en la zona media parar ir ejerciendo supremacía y arrimar peligro sobre el arco del arquero Jorge Cassarini. Todo se hacía muy trabado y la superpoblación de volantes hacía complicado para ambos elencos poder hilvanar acciones con criterio. En este contexto, Catamarca supo capitalizar su oportunidad al marcar el segundo gol a los nueve veinticuatro segundos a través de un remate de Oscar Ayala para establecer el dos tantos contra uno.
Ahora comenzó otro partido, porque Mar del Plata se la tenía que jugar para llegar a la igualdad en tanto que los norteños se mostraban más tranquilos al haber marcado la diferencia.
Ramón Reynoso introdujo un cambio al ingresar Carlos Gómez en reemplazo del delantero Germán Nievas buscando darle mayor potencia al sector de ataque.
Catamarca creció y estaba más cerca del tercero que Mar del Plata del empate. Los norteños tenían la posesión del balón y era el que generaba mayor peligro sobre la valla de Cassarini.
Mar del Plata quemaba las naves haciendo ingresar a Franco Pérez por García ante la posibilidad de poder llegar a la igualdad. Lo mismo hizo Reynoso dándole entrada a Adrián Rivera por el “Piti” Orquera.
La pelota seguía en poder de Catamarca. Oscar Ayala era el eje de los avances en un partido donde las infracciones estuvieron a la orden del día y las tarjetas amarillas brillaban por su ausencia.
Cassarini evitó la tercera caída de Mar del Plata ante un contragolpe fulminante de Catamarca al que le faltó la puntada final.
Tanto va el cántaro a la fuente que llegó la tercera conquista a través de Miguel Soto quien ante la salida del arquero del Lobo la puso a media altura para el 3 a 1.
El colegiado Díaz terminó el encuentro porque se rompió el alambrado donde estaba la hinchada de Catamarca cuando restaba un minuto treinta segundos. Con esto los norteños celebraron su bicampeonato donde tanto el plantel como su populosa hinchada dieron rienda suelta a la alegría. Muchas lágrimas en jugadores, viejos dirigentes, cuerpo técnico que tanto esfuerzo hicieron por lograr un campeonato donde fueron sin lugar a dudas el mejor elenco del certamen apertura.
En el marco de la última fecha del Torneo Apertura de la Liga de Fútbol Norte de Santa Cruz Catamarca se consagró campeón del torneo apertura al vencer por 3 tantos contra 1 a su similar de Mar del Plata. Los norteños sumaron una nueva estrella para su historia algo que lo venía buscando desde tiempo; ahora llegan al tiempo del festejo y de la mano del entrenador Ramón Reynoso llegaron a otro objetivo como es jugar el certamen del interior.
Los goles del campeón fueron anotados por Julio Martel, Oscar Ayala y Miguel Soto en tanto que el transitorio empate fue obra de Maximiliano Vera.En el arranque del partido, Ariel Nievas fue una de las figuras importantes a la hora de hilvanar acciones de peligro en la mitad de la cancha bien acompañado por el Chato Ayala.
El planteo de Mar del Plata era claro, no descuidarse en el fondo y salir de manera rápida de tres cuartos de cancha hacia delante con Vera, Maldonado y el Chelo González como puntales.
Julio Martel hizo pesar su experiencia y desde sus ganas sacaba a su equipo para adelante, su trabajo fue bien secundado tanto por Pozas como con Claudio Figueroa a la hora de proyectarse.
La primera ocasión del partido tuvo lugar con un remate de media distancia de Ariel Nieva que controló sin problemas el arquero Jorge Cassarini.
El juvenil Zamora se mostraba como una salida permanente para Mar del Plata por el sector izquierdo merced a su velocidad que los agarraba a contrapié a sus defensores.
El partido se mostraba equilibrado donde los dos intentaban ser los dueños de la pelota. El primer gol llegó a los cinco minutos tras un tiro de esquina, la defensa del Lobo se quedó dormido, Cassarini no lo pudo retener y ni lerdo ni perezoso Julio Martel mandó la pelota al fondo de la red parar establecer la diferencia de 1 a 0 a favor del conjunto local.
Un duro golpe para Mar del Plata, que había realizado un buen planteo pero ante un descuido ya tenía un gol en contra.
El estadio Senador Almendra era una caldera, una verdadera fiesta de papelitos y banderas que festejaron sin parar la ventaja en el marcador.
Mar del Plata replicó con un tiro libre por vía aérea que no llevó mayor peligro ante el despeje de Julio Martel, sin dudas una de las figuras del cotejo.
Franco Carpio pedía la pelota continuamente para ser la salida del norteño y luego prolonga en Miguel Soto, un delantero con gran movilidad que rotaba por todo el frente del ataque.
Mar del Plata no encontraba la llave para abrir la defensa de Catamarca que se crecía con el correr de los minutos. La orden desde el banco del Lobo era no desesperarse y jugar a ras del piso buscando abrir la defensa por las bandas.
En el caso del local, el entrenador Reynoso indicaba a los volantes en tener mayor tiempo la pelota para no dejar crecer a Mar del Plata que poco a poco iba a arrimando peligro sobre la valla defendida por Claudio Manchot.
Al norteño le faltaba mayor profundidad y explotar mejor los espacios dejados por los volantes de Mar del Plata cuando estos pasaban al ataque. El Chelo González comenzó a tener mayor contacto con el balón y esto redundaba en que el Lobo tenga mayor volumen de juego de tres cuartos de cancha hacia delante.
La primera tarjeta amarilla fue para Gustavo Sotomayor debido a una fuerte entrada a Oscar Ayala. De la misma acción una jugada preparada para la entrada por sorpresa de Claudio Figueroa que no pudo darle buena dirección a la pelota y esta se perdió fuera.
Cada vez que Mar del Plata intentaba llegar por vía aérea, la defensa del local mostraba algunas desinteligencias y tal vez era una de las alternativas para “lastimar” del Lobo.
En ataque la respuesta de Catamarca no se hizo esperar con un remate del Chato Ayala que fue desviado al tiro de esquina. Walter Pozas trató de sorprender al arquero Cassarini con un remate de media distancia que se fue desviado.
Cada pelota se disputaba como si fuese la última y no era para menos se definía un nuevo campeonato oficial de la Liga de Fútbol Norte.
Mar del Plata tuvo una oportunidad con el cobro de un tiro libre, pero el remate de Juan Vera se fue completamente desviado sobre el arco norteño. En contrapartida, Germán Nievas solo de cabeza tuvo la chance de aumentar la ventaja en el tanteador y su envío se perdió fuera.
En este contexto Maximiliano Vera rompió la monotonía del partido con un zapatazo de media distancia que se coló en el ángulo izquierdo para decretar el empate para el Lobo a los 35 minutos del primer tiempo; el arquero Manchot no tuvo nada que hacer ante el magistral remate.
Con el empate el partido ganó en dinámica y esto le puso mayor “pimienta” al trámite. La hinchada “La 22” comenzó a alentar más fuerte al equipo local para que se pueda recomponer del golpe que significó la igualdad.
Catamarca estuvo cerca de desnivelar mediante un remate de tiro libre que tuvo a un brillante arquero Jorge Cassarini enviando la pelota al tiro de esquina.
El partido en líneas generales fue equilibrado y el resultado de empate con que se fueron al descanso ambos planteles resultaba justo.
Segundo Tiempo - En Mar del Plata ingresó Ibáñez en reemplazo de Maldonado que se tuvo que retirar lesionado, por el lado de Catamarca no hubo variantes presentadas por Ramón Crisanto Reynoso. Las órdenes desde el banco norteño eran claras: ser más vertical y profundo, en tanto que Mar del Plata mantenía la calma y aprovechaba el adelantamiento de los jugadores de Catamarca.Alan Cortéz se erigió como uno de los puntales para Mar del Plata buscando recuperar los balones en la mitad de la cancha. Estaba claro que los norteños se jugaban enteros en pos de conseguir la victoria para poder ganar el bicampeonato.
Los volantes se multiplicaban en la zona media parar ir ejerciendo supremacía y arrimar peligro sobre el arco del arquero Jorge Cassarini. Todo se hacía muy trabado y la superpoblación de volantes hacía complicado para ambos elencos poder hilvanar acciones con criterio. En este contexto, Catamarca supo capitalizar su oportunidad al marcar el segundo gol a los nueve veinticuatro segundos a través de un remate de Oscar Ayala para establecer el dos tantos contra uno.
Ahora comenzó otro partido, porque Mar del Plata se la tenía que jugar para llegar a la igualdad en tanto que los norteños se mostraban más tranquilos al haber marcado la diferencia.
Ramón Reynoso introdujo un cambio al ingresar Carlos Gómez en reemplazo del delantero Germán Nievas buscando darle mayor potencia al sector de ataque.
Catamarca creció y estaba más cerca del tercero que Mar del Plata del empate. Los norteños tenían la posesión del balón y era el que generaba mayor peligro sobre la valla de Cassarini.
Mar del Plata quemaba las naves haciendo ingresar a Franco Pérez por García ante la posibilidad de poder llegar a la igualdad. Lo mismo hizo Reynoso dándole entrada a Adrián Rivera por el “Piti” Orquera.
La pelota seguía en poder de Catamarca. Oscar Ayala era el eje de los avances en un partido donde las infracciones estuvieron a la orden del día y las tarjetas amarillas brillaban por su ausencia.
Cassarini evitó la tercera caída de Mar del Plata ante un contragolpe fulminante de Catamarca al que le faltó la puntada final.
Tanto va el cántaro a la fuente que llegó la tercera conquista a través de Miguel Soto quien ante la salida del arquero del Lobo la puso a media altura para el 3 a 1.
El colegiado Díaz terminó el encuentro porque se rompió el alambrado donde estaba la hinchada de Catamarca cuando restaba un minuto treinta segundos. Con esto los norteños celebraron su bicampeonato donde tanto el plantel como su populosa hinchada dieron rienda suelta a la alegría. Muchas lágrimas en jugadores, viejos dirigentes, cuerpo técnico que tanto esfuerzo hicieron por lograr un campeonato donde fueron sin lugar a dudas el mejor elenco del certamen apertura.
La Prensa de Santa Cruz
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