LIGA DE RIO GALLEGOS
El azurro le dio vuelta el partido a Independiente, y se quedó con la victoria por 4 a 2, cuando perdía 2 a 0. Mañana, Ferro y Boca RG cierran la cuarta fecha, con la posibilidad de que el Xeneize quede como único líder.
Foto: Romina Barrientos. Texto: La Opinión Austral
En una tarde gris, que colaboró para poder jugar de la mejor manera, se llevó a cabo un partido más de la cuarta jornada del Torneo 2009 de la Liga de Fútbol Sur, en el cual Bancruz se quedó con el clásico, al superar por 4 a 2 a Independiente, en cancha de Boxing. No fue un encuentro cualquiera, ya que la rivalidad entre ambos fue demostrada en el campo y en cada pelota dividida, pero la atracción pasó por el gran segundo tiempo, plagado de goles y de situaciones que dejaron a la vista un buen espectáculo.
El partido no arrancó nada bien para los bancarios, ya que si bien supo manejar por momentos las acciones del partido, le costó mucho poder superar la defensa del Rojo que se mostró muy sólida en los primeros 45 minutos de juego. Si bien buscó mucho por la zona derecha, en la cual se ubicó Miguel Rivera, no pudo en esa etapa encontrar el hueco que le permitiera dar el primer golpe. De hecho, por buscar tanto, Bancruz se descuidó en el fondo, y le pasaron la factura, ya que de una mala salida de su arquero, Javier Stekar, Diego Ojeda se encontró solo con la pelota y no perdonó. Era el 1 a 0 para Independiente, que a los 35 minutos, se encontraba con un tanto arriba y con más firmeza en el campo, ante la solidez de todas sus líneas. Tal vez no tuvo mayor posesión del balón, no contó con las situaciones más claras, pero tampoco pasó sobresaltos, y cuando tuvo que anotar lo hizo. Así el Rojo se fue más tranquilo al descanso, con la sola idea de repetir lo realizado para poder quedarse con los tres puntos.
El complemento trajo una historia completamente diferente a la vivida en la etapa inicial. Si bien en el comienzo el desarrollo se vio similar, no resultó así.
Es que el conjunto dirigido por Nelson Aguilar se encontró ante una nueva oportunidad y no la volvió a desaprovechar, siendo esta vez Mario Gómez el encargado de aumentar la diferencia en el marcador, y de darle tranquilidad a su equipo, que así más protagonista sería del encuentro.
Pero llegó lo que nadie esperaba, un giro en el clásico. Y tan fuerte fue el cambio, que en pocos minutos el conjunto de Bancruz no sólo se vio arriba en el tanteador, sino que además se encontró atancando con una buena cantidad de delanteros, sedientos de gol, y con un hombre más en el campo de juego. Martín Reynoso fue quien tuvo que dejar el partido antes de tiempo, ya que por doble amarilla dejó a su equipo con un jugador menos, dándole la oportunidad al rival de reaccionar cuando estaba contra las cuerdas.
Y lo peor que podés hacer frente a un equipo que anotó once goles en las dos fechas anteriores, es darle facilidades para poder atacar, y el azurro las tuvo. Astuto Oscar Lemes introdujo en campo sólo jugadores con vocación ofensiva, sin descuidar su zona baja, para ir en busca de la victoria, con todas las armas que tenía a mano.
Debido a esto, sin desesperarse, tratando bien el balón, acumulando gente en ataque, y logrando que el rival cediera sus espacios, Bancruz de a poco fue efectivizando todas las acciones de peligro generadas. Javier Lastra, Miguel Rivera (la figura del choque), en dos oportunidades, y Pablo Barría, fueron los encargados de darle ese giro definitivo a la historia, para liquidar el partido en un 4 a 2, que ahora los invita a soñar.
Pasó una nueva edición de uno de los clásicos con los que cuenta la ciudad de Río Gallegos en esta categoría, con muchas emociones, momentos de buen juego, y por sobre todas las cosas una buena cantidad de gritos de gol, algo que hace que este partido no se olvide rápidamente.
Ahora el equipo de Lemes se sumó a la punta, acumulando nueve unidades, al igual que Boca RG y El Puerto (la revelación del torneo), pero su satisfacción pasa por los 15 goles anotados en tan solo tres fechas, contando con una diferencia de gol de +12, demostrando que no sólo ataca bien, sino que defiende de buena manera también. Por el lado de Independiente, otro golpe que lo deja un poco lejos de la punta, pero con el tiempo necesario para poder reaccionar y revertir la imagen dejada en la tarde de ayer.
El azurro le dio vuelta el partido a Independiente, y se quedó con la victoria por 4 a 2, cuando perdía 2 a 0. Mañana, Ferro y Boca RG cierran la cuarta fecha, con la posibilidad de que el Xeneize quede como único líder.
Foto: Romina Barrientos. Texto: La Opinión Austral
En una tarde gris, que colaboró para poder jugar de la mejor manera, se llevó a cabo un partido más de la cuarta jornada del Torneo 2009 de la Liga de Fútbol Sur, en el cual Bancruz se quedó con el clásico, al superar por 4 a 2 a Independiente, en cancha de Boxing. No fue un encuentro cualquiera, ya que la rivalidad entre ambos fue demostrada en el campo y en cada pelota dividida, pero la atracción pasó por el gran segundo tiempo, plagado de goles y de situaciones que dejaron a la vista un buen espectáculo.
El partido no arrancó nada bien para los bancarios, ya que si bien supo manejar por momentos las acciones del partido, le costó mucho poder superar la defensa del Rojo que se mostró muy sólida en los primeros 45 minutos de juego. Si bien buscó mucho por la zona derecha, en la cual se ubicó Miguel Rivera, no pudo en esa etapa encontrar el hueco que le permitiera dar el primer golpe. De hecho, por buscar tanto, Bancruz se descuidó en el fondo, y le pasaron la factura, ya que de una mala salida de su arquero, Javier Stekar, Diego Ojeda se encontró solo con la pelota y no perdonó. Era el 1 a 0 para Independiente, que a los 35 minutos, se encontraba con un tanto arriba y con más firmeza en el campo, ante la solidez de todas sus líneas. Tal vez no tuvo mayor posesión del balón, no contó con las situaciones más claras, pero tampoco pasó sobresaltos, y cuando tuvo que anotar lo hizo. Así el Rojo se fue más tranquilo al descanso, con la sola idea de repetir lo realizado para poder quedarse con los tres puntos.
El complemento trajo una historia completamente diferente a la vivida en la etapa inicial. Si bien en el comienzo el desarrollo se vio similar, no resultó así.
Es que el conjunto dirigido por Nelson Aguilar se encontró ante una nueva oportunidad y no la volvió a desaprovechar, siendo esta vez Mario Gómez el encargado de aumentar la diferencia en el marcador, y de darle tranquilidad a su equipo, que así más protagonista sería del encuentro.
Pero llegó lo que nadie esperaba, un giro en el clásico. Y tan fuerte fue el cambio, que en pocos minutos el conjunto de Bancruz no sólo se vio arriba en el tanteador, sino que además se encontró atancando con una buena cantidad de delanteros, sedientos de gol, y con un hombre más en el campo de juego. Martín Reynoso fue quien tuvo que dejar el partido antes de tiempo, ya que por doble amarilla dejó a su equipo con un jugador menos, dándole la oportunidad al rival de reaccionar cuando estaba contra las cuerdas.
Y lo peor que podés hacer frente a un equipo que anotó once goles en las dos fechas anteriores, es darle facilidades para poder atacar, y el azurro las tuvo. Astuto Oscar Lemes introdujo en campo sólo jugadores con vocación ofensiva, sin descuidar su zona baja, para ir en busca de la victoria, con todas las armas que tenía a mano.
Debido a esto, sin desesperarse, tratando bien el balón, acumulando gente en ataque, y logrando que el rival cediera sus espacios, Bancruz de a poco fue efectivizando todas las acciones de peligro generadas. Javier Lastra, Miguel Rivera (la figura del choque), en dos oportunidades, y Pablo Barría, fueron los encargados de darle ese giro definitivo a la historia, para liquidar el partido en un 4 a 2, que ahora los invita a soñar.
Pasó una nueva edición de uno de los clásicos con los que cuenta la ciudad de Río Gallegos en esta categoría, con muchas emociones, momentos de buen juego, y por sobre todas las cosas una buena cantidad de gritos de gol, algo que hace que este partido no se olvide rápidamente.
Ahora el equipo de Lemes se sumó a la punta, acumulando nueve unidades, al igual que Boca RG y El Puerto (la revelación del torneo), pero su satisfacción pasa por los 15 goles anotados en tan solo tres fechas, contando con una diferencia de gol de +12, demostrando que no sólo ataca bien, sino que defiende de buena manera también. Por el lado de Independiente, otro golpe que lo deja un poco lejos de la punta, pero con el tiempo necesario para poder reaccionar y revertir la imagen dejada en la tarde de ayer.