Omar Lugo, Eduardo Lugo y Marcelo Crosignani, en ese orden, componen el tridente arbitral. Típica vestimenta azulgrana para el equipo de Pablo Valencio, mientras que Boca, ya en la cancha, luce la que ya nos tiene acostumbrado, toda de un azul oscuro, con vivos amarillos y blancos que parten desde el cuello y caen por los brazos hasta los puños. Nunca se me ocurrió preguntar el porqué siendo Boca, no usa la camiseta de Boca, porque en cuarta si la he visto.
El aquí presente es “otro” Boca, con la cabeza más puesta en el zonal, llega con varios cambios, pero sobre todo se destaca la inclusión en el equipo titular de muchachos que militan en cuarta división: Diego Segura, casaca veinticinco y Fabián Arce con la veinte. Este delgado y en apariencia frágil Segura, arranca bien tirado sobre la izquierda y empieza a complicar a su marca.
Sobre los nueve tiro libre desde la derecha, tres cuartos de cancha en ataque para el xeneize, va Diego pegarle de zurda, Nicolai salta del banco lo llama, el pibe obedece al toque. “pegale llovida al segundo palo a la cabeza de Riquelme” OK asiente Diego, y la pone a pedido, pero el cabezazo de Alexis, sale apenas desviado. Avisaba Boca.
Tío Sam, era otra historia había completado los once, y puso un suplente que llegó a las corridas, cosas de nuestro fútbol, ya que es sabido que muchos muchachos que militan en nuestro fútbol, dependen por sus trabajos de un permiso, un guiño de “Anda nomás” pero no siempre es posible, entonces Valencia puso que lo pudo, improvisó un arquero, y le dio el buzo a Hernando Rondan, faltaba Ricardo Podestá bajo los tres palos, además de David Sosa entre otros, y obviamente el Tío lo sentía.
Cristian Bazán, un exquisito de nuestro fútbol, volanteaba por izquierda, José Mansilla le hacía “Atención al cliente” cada vez que Cristian vendía una gambeta. Y Boca puso a rodar un esquema simple pero eficaz, lo esperaba y le metía pelotazos a Daniel Escobar, que con dos zancadas sacaba ventaja. Y tal es así que sobre el minuto dieciocho en un ataque del Tío, llega el gol de Boca…Como??? Si lo que lee, le garantizo que yo no tomo. Avance por la izquierda de Bazán, Cristian le mete un pase largo a Guerrero, pero sale presuroso Maxi Gómez, la atrapa, y de su pie derecho sale un latigazo, que recorre todo el campo, quedo de la defensa azulgrana y Serón y Escobar se pelean por quien se la lleva, “dejamela a mi Mauricio” y el formoseño en tres trancos está cara a cara con Rondan, lo deja de "gateo" al arquero, con gambeta corta hacia la izquierda, y con todo a su disposición sin nervios ni apuros, dice que Boca está al frente por uno a cero.
De ahí en más la llovizna se hizo lluvia, y Tío Sam acusando el golpe se adelanto unos metros en campo, a sabiendas de la posibilidad de la contra de Boca.
Sobre los cuarenta, Julio Cárdenas casaca número siete azulgrana, agarra la pelota por derecha, escucho que unos le dicen “chueco” otros “petiso” pero hay que agregarle otro sinónimo, y es el de gran jugador, lo deja parado a gambeta limpia a Aguirre, y con cara externa de su botín derecho, mete un sablazo que resuena en el travesaño ante la mirada suplicante de Maxi Gómez que no tenía reacción.
Pero tres minutos más tarde, otro pelotazo en profundidad para Boca, cierto es que Escobar estaba adelantado, pero no quiere participar en la jugada y no lo hace, pero si desde atrás venía pidiendo cancha Riquelme perfectamente habilitado y ante la salida del arquero la toca suave por sobre la humanidad de Rondan, y Daniel Escobar, empuja ante la desesperación de un defensor que no puede evitar que Boca esté ahora dos a cero arriba.
El entretiempo se pasó con todos los espectadores presentes en sus autos, otro juvenil, en este caso Lucas Gonzalo, con la once en la espalda, recibía las expresas indicaciones de Nicolai, porque arrancaba desde el inicio de la etapa en reemplazo de Serón.
Y cuando pitó Lugo, Tío Sam tuvo cinco minutos interesantes, como si intentara descontar en el menor tiempo posible.
Un Guerrero más movedizo y punzante, podía ser la carta de Valencio … pero solo fue un intento porque Boca copó la parada, Sandoval, jugando casi a media máquina como si esas fueran las indicaciones, llevó a su equipo a campo contrario, y sobre los siete, otro pelotazo largo para un Escobar inspirado en cuanto al gol, que la pone al palo derecho de Rondan y con un tres a cero, Boca cedió la pelota, esperó en el fondo con un Ariel Pérez bien parado, y las pocas que pasaban Maxi Gómez daba tranquilidad a su equipo. Es cierto Tío Sam hacía el esfuerzo y Boca los goles, pero el azulgrana jugaba hasta el borde del área grande, allí se diluía por completo, y Boca con un resultado de tres por nada, más que cómodo, tan cómodo, que nuevamente el formoseño numero siete, toma la pelota, se hace un auto pase, hay bandera levantada, pero Lugo, hace una lectura perfecta de la jugada, y extiende los brazos en señal de “Siga” y Daniel sigue y ante la salida de Martín Manassero, que después de la tercera conquista pasó a ocupar el lugar de otro arquero improvisado, marca el cuarto de Boca, y el cuarto de su factura personal.
Los muchachos de Tío Sam, reclamaban a un Lugo, que marcó el centro del campo, y más que razón tenía el árbitro del partido. Que levantó la bandera el línea?? Si, pero recordemos que son colaboradores o asistentes como usted prefiera, y quien en definitiva sanciona es el árbitro y este no dudo ni un segundo, y reitero hizo una lectura correcta de la jugada.
A esta altura, los azulgranas, por nervios, impotencia, por el resultado mismo, recurrieron a un juego brusco, que al menos yo no estoy acostumbrado a ver en Tío Sam, pero el silbato generoso de Lugo, marcó final, y los saludos de unos y otros daban la seguridad de que el pleito había terminado, se iban todos tranquilos.
Ganó Boca, que este fin de semana andará de zonal por la cuenca carbonífera, lastima no poder ir a verlos…. bueno como hincha del fútbol de mi ciudad … la mejor de las suertes.
Tío Sam 0
Boca Río Gallegos 4
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