COMODORO RIVADAVIA
Banderas con una “V” tachada dentro de un círculo, salieron a relucir el último sábado en la tribuna y las plateas del “Lobo”, en el triunfo sobre Atlético San Julián por el arranque del torneo Argentino “C”.
Banderas con una “V” tachada dentro de un círculo, salieron a relucir el último sábado en la tribuna y las plateas del “Lobo”, en el triunfo sobre Atlético San Julián por el arranque del torneo Argentino “C”.
El Patagónico.
La “V” tachada dentro círculo simboliza la negación de la verdadera familia “aeronauta” a participar de la violencia en el fútbol.
El fútbol comodorense no escapa de la realidad que vive el país. El clima de violencia que se vive en las canchas, ha alejado a familias que antes asistían a los espectáculos deportivos.
Sin ir más lejos, hoy los equipos de la Primera “B” Nacional no pueden contar con la presencia de sus hinchas cuando juegan de visitante. Y no se debe olvidar que el principal motivo por el que no se jugó el último clásico Newbery-Huracán fue por el alto riesgo que presenta el encuentro, y por la incompetencia de algunos sectores que miran para otro lado.
Ese factor fue determinante, al momento de pensar en las mejoras que puede realizar Jorge Newbery al respecto.
De la mano de los hermanos Hugo Barrientos (Huracán de Parque Patricios) y Pablo Barrientos (San Lorenzo de Almagro), que llevan los colores “aeronautas” en la piel y hoy colaboran fuertemente con la dirigencia, se está llevando adelante una campaña contra la violencia en el fútbol.
En el encuentro del último sábado frente a Atlético San Julián, la hinchada del “Lobo” agitó durante todo el encuentro estandartes con un símbolo que no es habitual en el fútbol de Comodoro: una “V” tachada dentro de un círculo.
Este símbolo representa la intención del club de no ser partícipe directo de la violencia. Pamela Uribe, responsable del departamento de prensa de la institución del barrio 9 de Julio, resumió cuál es el pensamiento de los verdaderos hinchas de Newbery sobre los violentos, que no tienen color de camiseta.
“La gente dejó de ir a la cancha por la violencia. Hay chicos de entre 12 y 14 años que van a hacer lío, que no te pagan la entrada y te hacen destrozos. Ese no es hincha de este club ni de ningún otro club”, sentenció.
Mientras la dirigencia negocia con una ONG que pueda facilitar un sponsor en medio de esta iniciativa, la hinchada apoya el proyecto desde su lugar y continúa colaborando en las distintas reparaciones que se están realizando en el club. Un ejemplo a imitar.
La “V” tachada dentro círculo simboliza la negación de la verdadera familia “aeronauta” a participar de la violencia en el fútbol.El fútbol comodorense no escapa de la realidad que vive el país. El clima de violencia que se vive en las canchas, ha alejado a familias que antes asistían a los espectáculos deportivos.
Sin ir más lejos, hoy los equipos de la Primera “B” Nacional no pueden contar con la presencia de sus hinchas cuando juegan de visitante. Y no se debe olvidar que el principal motivo por el que no se jugó el último clásico Newbery-Huracán fue por el alto riesgo que presenta el encuentro, y por la incompetencia de algunos sectores que miran para otro lado.
Ese factor fue determinante, al momento de pensar en las mejoras que puede realizar Jorge Newbery al respecto.
De la mano de los hermanos Hugo Barrientos (Huracán de Parque Patricios) y Pablo Barrientos (San Lorenzo de Almagro), que llevan los colores “aeronautas” en la piel y hoy colaboran fuertemente con la dirigencia, se está llevando adelante una campaña contra la violencia en el fútbol.
En el encuentro del último sábado frente a Atlético San Julián, la hinchada del “Lobo” agitó durante todo el encuentro estandartes con un símbolo que no es habitual en el fútbol de Comodoro: una “V” tachada dentro de un círculo.
Este símbolo representa la intención del club de no ser partícipe directo de la violencia. Pamela Uribe, responsable del departamento de prensa de la institución del barrio 9 de Julio, resumió cuál es el pensamiento de los verdaderos hinchas de Newbery sobre los violentos, que no tienen color de camiseta.
“La gente dejó de ir a la cancha por la violencia. Hay chicos de entre 12 y 14 años que van a hacer lío, que no te pagan la entrada y te hacen destrozos. Ese no es hincha de este club ni de ningún otro club”, sentenció.
Mientras la dirigencia negocia con una ONG que pueda facilitar un sponsor en medio de esta iniciativa, la hinchada apoya el proyecto desde su lugar y continúa colaborando en las distintas reparaciones que se están realizando en el club. Un ejemplo a imitar.
