RENE MUÑOZ - DEFENSORES DEL CARMEN
El plantel de Defensores del Carmen llegó a la ciudad en la madrugada de ayer, tras haber culminado su participación en el torneo Argentino C. Más allá de la derrota ante Newbery, René Muñoz destacó la campaña de su equipo y se mostró orgulloso de lo que se pudo conseguir.
La Opinión Austral
Corrían cerca de las 6:30 de la mañana de ayer, cuando el plantel de Defensores del Carmen arribó a Río Gallegos desde Comodoro Rivadavia, lugar en el que se le acabó el sueño del Argentino C.
El culpable había sido Jorge Newbery, quien logró -aunque trabajosamente- superar al equipo santacruceño por 1 a 0, jugando de local en una cancha que albergó en ese encuentro a casi 5000 almas que alentaron al “Lobo” durante todo el partido.
Se dejó todo, pero no se pudo llegar más lejos. Más allá de la dolorosa derrota, el técnico se animó a mostrarse optimista; “Para nosotros ha sido una campaña muy importante. Nunca lo dijimos, pero nuestro objetivo era conseguir posicionarnos mejor que en el torneo pasado, cuando no logramos pasar la fase clasificatoria. Por eso es que nuestro objetivo está cumplido, pero cada vez que dábamos un paso queríamos más, siempre más”, indicó René Muñoz.
La derrota se dio en un marco inmejorable, Defensores perdió por la mínima en tierras foráneas, ante un gran público que no dejó de alentar en los 90 minutos. “Esto también metió un poco de presión -agregó el DT-, algunos jugadores no pudieron evitar distraerse en los primeros minutos, es algo a lo que no estamos acostumbrados; sin embargo, también estuvieron los que no se vieron afectados y desde el inicio jugaron con la misma intensidad”.
Al referirse al encuentro, “Peneca” refirió que el partido salió como lo habían pensado, muy trabado y con el local atacando desde el inicio en busca de la ventaja.
“Nosotros hicimos nuestro juego, pudimos aguantar bien y jugamos de igual a igual. Nos complicó un poco la salida de Mario Clavel, pero en esto no se notó demasiado la diferencia numérica en el juego”. También agregó que el arbitraje tuvo algunos desaciertos, pero que dentro de los parámetros normales fue regular; “uno siempre puede discutir algún fallo; a nosotros no nos pareció que las faltas de Clavel merecieran amarilla; hubo durante todo el encuentro faltas más graves o evidentes no sólo en Newbery, pero el árbitro no inclinó la cancha, aunque en algunas pelotas decisivas fue un tanto parcial. Newbery ganó bien, aunque nosotros hicimos un gran partido y estuvimos muy cerca de conseguir empatar sobre el final”.
Tras el partido llegó la hora del desconsuelo, aunque se había logrado un objetivo, muchos lamentaron, incluso entre lágrimas, el final del camino.
“Se termina un sueño, pero comienza inmediatamente otro; eso es lo que traté de trasmitirles a los jugadores cuando fuimos a los vestuarios. Fueron lógicas las lágrimas de la gente que trabajó muy duro, y a pesar del gran esfuerzo no se consiguió avanzar, pero me siento orgulloso del equipo que me toca dirigir. No lo digo sólo ahora, durante el partido, la actitud de Defensores del Carmen fue siempre de dejar todo en cada jugada, semejante muestra de coraje me llenó de orgullo; los jugadores pueden mirarse a la cara tranquilos, conscientes de haber puesto todo en el torneo”. En esto también destacó el trabajo del profesor Carlos Ruiz en la preparación física, indicando que el equipo jugó de igual a igual, corriendo los 90 minutos en una zona en que la temperatura fue sensiblemente superior a las acostumbradas en la capital santacruceña.
“Ahora nos tenemos que concentrar en el torneo local -agregó-. Vamos a cerrar este capítulo para dedicarnos a buscar el campeonato de la Liga Sur con la misma convicción que pusimos en todo el torneo argentino”.
También agradeció a toda la gente del club, que apoyó al equipo de manera incondicional, indicando especialmente a Juan Víctor Cárdenas, presidente de la institución.
“Por supuesto, no puedo dejar de lado a los jugadores y al cuerpo técnico, un equipo de trabajo que dejó todo no sólo ante Newbery, sino en todo el torneo”, concluyó.
Cabe aclarar que por haber terminado entre los primeros tres equipos en el pasado torneo local, Defensores ya tiene reservada una plaza para la nueva edición del Argentino C, que comenzará a disputarse en enero de 2011 y para la cual, Boxing también volverá a ser de la partida.
El plantel de Defensores del Carmen llegó a la ciudad en la madrugada de ayer, tras haber culminado su participación en el torneo Argentino C. Más allá de la derrota ante Newbery, René Muñoz destacó la campaña de su equipo y se mostró orgulloso de lo que se pudo conseguir.
La Opinión Austral
Corrían cerca de las 6:30 de la mañana de ayer, cuando el plantel de Defensores del Carmen arribó a Río Gallegos desde Comodoro Rivadavia, lugar en el que se le acabó el sueño del Argentino C.El culpable había sido Jorge Newbery, quien logró -aunque trabajosamente- superar al equipo santacruceño por 1 a 0, jugando de local en una cancha que albergó en ese encuentro a casi 5000 almas que alentaron al “Lobo” durante todo el partido.
Se dejó todo, pero no se pudo llegar más lejos. Más allá de la dolorosa derrota, el técnico se animó a mostrarse optimista; “Para nosotros ha sido una campaña muy importante. Nunca lo dijimos, pero nuestro objetivo era conseguir posicionarnos mejor que en el torneo pasado, cuando no logramos pasar la fase clasificatoria. Por eso es que nuestro objetivo está cumplido, pero cada vez que dábamos un paso queríamos más, siempre más”, indicó René Muñoz.
La derrota se dio en un marco inmejorable, Defensores perdió por la mínima en tierras foráneas, ante un gran público que no dejó de alentar en los 90 minutos. “Esto también metió un poco de presión -agregó el DT-, algunos jugadores no pudieron evitar distraerse en los primeros minutos, es algo a lo que no estamos acostumbrados; sin embargo, también estuvieron los que no se vieron afectados y desde el inicio jugaron con la misma intensidad”.
Al referirse al encuentro, “Peneca” refirió que el partido salió como lo habían pensado, muy trabado y con el local atacando desde el inicio en busca de la ventaja.
“Nosotros hicimos nuestro juego, pudimos aguantar bien y jugamos de igual a igual. Nos complicó un poco la salida de Mario Clavel, pero en esto no se notó demasiado la diferencia numérica en el juego”. También agregó que el arbitraje tuvo algunos desaciertos, pero que dentro de los parámetros normales fue regular; “uno siempre puede discutir algún fallo; a nosotros no nos pareció que las faltas de Clavel merecieran amarilla; hubo durante todo el encuentro faltas más graves o evidentes no sólo en Newbery, pero el árbitro no inclinó la cancha, aunque en algunas pelotas decisivas fue un tanto parcial. Newbery ganó bien, aunque nosotros hicimos un gran partido y estuvimos muy cerca de conseguir empatar sobre el final”.
Tras el partido llegó la hora del desconsuelo, aunque se había logrado un objetivo, muchos lamentaron, incluso entre lágrimas, el final del camino.
“Se termina un sueño, pero comienza inmediatamente otro; eso es lo que traté de trasmitirles a los jugadores cuando fuimos a los vestuarios. Fueron lógicas las lágrimas de la gente que trabajó muy duro, y a pesar del gran esfuerzo no se consiguió avanzar, pero me siento orgulloso del equipo que me toca dirigir. No lo digo sólo ahora, durante el partido, la actitud de Defensores del Carmen fue siempre de dejar todo en cada jugada, semejante muestra de coraje me llenó de orgullo; los jugadores pueden mirarse a la cara tranquilos, conscientes de haber puesto todo en el torneo”. En esto también destacó el trabajo del profesor Carlos Ruiz en la preparación física, indicando que el equipo jugó de igual a igual, corriendo los 90 minutos en una zona en que la temperatura fue sensiblemente superior a las acostumbradas en la capital santacruceña.
“Ahora nos tenemos que concentrar en el torneo local -agregó-. Vamos a cerrar este capítulo para dedicarnos a buscar el campeonato de la Liga Sur con la misma convicción que pusimos en todo el torneo argentino”.
También agradeció a toda la gente del club, que apoyó al equipo de manera incondicional, indicando especialmente a Juan Víctor Cárdenas, presidente de la institución.
“Por supuesto, no puedo dejar de lado a los jugadores y al cuerpo técnico, un equipo de trabajo que dejó todo no sólo ante Newbery, sino en todo el torneo”, concluyó.
Cabe aclarar que por haber terminado entre los primeros tres equipos en el pasado torneo local, Defensores ya tiene reservada una plaza para la nueva edición del Argentino C, que comenzará a disputarse en enero de 2011 y para la cual, Boxing también volverá a ser de la partida.
