ZONA 2 – BOCA RG 3 vs BOXING 0
Boca venció a Boxing por tres a cero y lo dejó fuera del torneo del Interior 2009, cuando aun resta una fecha para cerrar la primera fase de la zona dos. Leandro Fernández en dos ocasiones y Carlos Muñoz cuando moría el partido sellaron la suerte del albiverde, que jugó gran parte del partido con un hombre de más, pero a pesar de dominar territorialmente a Boca, puntualmente en la segunda parte, careció de ideas para vulnerar a una sólida defensa .Richard Bazán en Boxing y Carlos Muñoz en Boca fueron las figuras del encuentro. Raro pero cierto, la floja tarea de Don Eduardo Lugo.
Fotos: Romina Barrientos. Texto: Alfredo Galvez.
Como siempre a estos partidos llego temprano y si bien falta una hora para el encuentro, Boca ya ha salido al campo de juego para hacer la rutina de entrada en calor. En la formación titular xeneize, Rapalín solo ha modificado en relación a su último compromiso el ingreso de Jorge Olguín que vuelve del purgatorio de dos fechas, en reemplazo de Damian Barrionuevo que ocupa un lugar entre los suplentes, el resto son los mismos que vencieron hace siete días a Cóndor en cancha de Ferro.
Boxing con el regreso de Julián Ojeda por la banda derecha en ataque y Maxi Chávez que cumplida la suspensión arranca de titular en los cambios más significativos del albiverde. Eduardo Lugo asignado a dirigir el encuentro, flaqueado por Juan Navarro y Mariela Puche minutos antes de las quince horas, ingresan al verde sintético del Defensores del Carmen. Que las cábalas no juegan es cierto, pero andá a explicarle esto a un Boxing, que jamás alista en sus numeraciones las cascas “13” y “17” y decile entonces a Boca que no tenía necesidad de jugar con camiseta alternativa, sin embargo aparece vestido todo de amarillo que solo me da a pensar que con esta casaca vencieron en dos ocasiones y sumaron siete goles…
Antes del pitazo de Lugo, me anticipo a imaginarme un partido sin estudios previos, con un Boxing intentando llevarse por delante al rival como sea, si es con fútbol mejor, pero con la idea fija desde el vamos de adueñarse de los tres puntos, porque sabe que si empata, necesita que Júpiter pierda, para seguir con chances, pero tiene bien en claro que si pierde se queda con las manos vacías. Boca ya tiene la clasificación en la mano, por lo que eso me juega en contra de mi presagio en cuanto a que hará el xeneize. En definitiva me suena a partidazo.
Pero créame amigo lector, que nada más lejos de acertarle en mi pronóstico.
Partido jugado puntualmente en la primera parte, en la lucha de adueñarse de la mitad de la cancha, y allí se repartieron en todo, en ganar la pelota, en perderla, en dar malos pases, en tirar pelotazos de un lado y del otro, donde poner la pelota al ras del piso parecía un pecado capital. Y si la pierdo, “raspo”, nada alevoso ojo eh!, tampoco vamos a exagerar, pero si sistemático, Flavio Márquez, Diego Sandoval por el lado de Boca, Claudio Medina y un escalón más abajo Jancich, jugaban a eso de muñeco a tierra, y el partido era solo eso, ver al rival y voltearlo. Fútbol muy poco, por lo que vale arrancar con la escalada en velocidad de Abel Simoes por izquierda a poco de iniciado el encuentro, toque a Matus que ingresa por ese lado dentro de área, la cruza ante la salida de Martínez y la pelota pasa a centímetros del caño izquierdo de Eduardo. Dos minutos más tarde otra escala por el lado zurdo del ataque albiverde, centro al corazón del área, y en la pelotera Muñoz de punta y para arriba aleja el peligro de su arco.
Y salvo algún tiro libre, generalmente por izquierda a manos de Maxi Chávez, Boxing no generaba juego en ataque. Julián Ojeda prácticamente no fue tenido en cuenta en casi toda la primera etapa por lo que Juli, tuvo que buscar el juego, primero apareció en la posición de Matus, y después se volcó casi como un puntero izquierdo, pero siempre lejos de la zona caliente. Boca?? Poco, muy poco, El despliegue siempre al servicio del xeneize por parte de Lucas Ceballos, el batallar mencionado de Sandoval y Márquez en un duelo particular con Medina, y como Claudio ganaba y perdía por ese lado, cambió de rumbo y lo fue a buscar a Leandro Fernández cerca de la banda y le hizo cirugía menor, que Eduardo Lugo solo arregló con un “sana sana colita de rana”. Cuando a esta altura Tanto Medina, como Sandoval habían ganado por licitación una tarjeta amarilla que Don Eduardo se empecinaba en no sacar. Y la “vendetta” quiso ser de Lucas por el honor de los Fernández y sobre cartón en la jugada siguiente salió a buscar al tucumano muy lejos, y para colmo falló en su intento de “justicia”.. “Y ya que estamos” pensó Lucas que pase el que sigue, y Simoes que era el que seguía, vuela por el aire. Falta, de eso no caben dudas, espero al menos ahora sí la primer amarilla del partido, pero me sorprende Don Eduardo con una roja directa a Lucas Fernández, que deja a Boca con diez y falta un toco de minutos por jugar.
Pero el tiempo transcurre y Boxing no sabe aprovechar la diferencia numérica, es más ni siquiera se ha notado, Rapalín bajó unos metros a Diego Sandoval, corrió un poco a Jorge Olguín para dejarlo “stand by” de seis y tres al mismo tiempo y chau pinela. Minuto treinta y cinco, Boca en ataque, desborde de Manchafico por derecha centro de Víctor, pasado al segundo palo, El “tigre” la baja de cabeza para que Leandro Fernández casi como nueve y dentro del área, de zurda le pegue mordida para que Maxi Gómez impida el primer grito de gol boquense.
Boca venció a Boxing por tres a cero y lo dejó fuera del torneo del Interior 2009, cuando aun resta una fecha para cerrar la primera fase de la zona dos. Leandro Fernández en dos ocasiones y Carlos Muñoz cuando moría el partido sellaron la suerte del albiverde, que jugó gran parte del partido con un hombre de más, pero a pesar de dominar territorialmente a Boca, puntualmente en la segunda parte, careció de ideas para vulnerar a una sólida defensa .Richard Bazán en Boxing y Carlos Muñoz en Boca fueron las figuras del encuentro. Raro pero cierto, la floja tarea de Don Eduardo Lugo.
Fotos: Romina Barrientos. Texto: Alfredo Galvez.
Como siempre a estos partidos llego temprano y si bien falta una hora para el encuentro, Boca ya ha salido al campo de juego para hacer la rutina de entrada en calor. En la formación titular xeneize, Rapalín solo ha modificado en relación a su último compromiso el ingreso de Jorge Olguín que vuelve del purgatorio de dos fechas, en reemplazo de Damian Barrionuevo que ocupa un lugar entre los suplentes, el resto son los mismos que vencieron hace siete días a Cóndor en cancha de Ferro.Boxing con el regreso de Julián Ojeda por la banda derecha en ataque y Maxi Chávez que cumplida la suspensión arranca de titular en los cambios más significativos del albiverde. Eduardo Lugo asignado a dirigir el encuentro, flaqueado por Juan Navarro y Mariela Puche minutos antes de las quince horas, ingresan al verde sintético del Defensores del Carmen. Que las cábalas no juegan es cierto, pero andá a explicarle esto a un Boxing, que jamás alista en sus numeraciones las cascas “13” y “17” y decile entonces a Boca que no tenía necesidad de jugar con camiseta alternativa, sin embargo aparece vestido todo de amarillo que solo me da a pensar que con esta casaca vencieron en dos ocasiones y sumaron siete goles…
Antes del pitazo de Lugo, me anticipo a imaginarme un partido sin estudios previos, con un Boxing intentando llevarse por delante al rival como sea, si es con fútbol mejor, pero con la idea fija desde el vamos de adueñarse de los tres puntos, porque sabe que si empata, necesita que Júpiter pierda, para seguir con chances, pero tiene bien en claro que si pierde se queda con las manos vacías. Boca ya tiene la clasificación en la mano, por lo que eso me juega en contra de mi presagio en cuanto a que hará el xeneize. En definitiva me suena a partidazo.
Pero créame amigo lector, que nada más lejos de acertarle en mi pronóstico.
Partido jugado puntualmente en la primera parte, en la lucha de adueñarse de la mitad de la cancha, y allí se repartieron en todo, en ganar la pelota, en perderla, en dar malos pases, en tirar pelotazos de un lado y del otro, donde poner la pelota al ras del piso parecía un pecado capital. Y si la pierdo, “raspo”, nada alevoso ojo eh!, tampoco vamos a exagerar, pero si sistemático, Flavio Márquez, Diego Sandoval por el lado de Boca, Claudio Medina y un escalón más abajo Jancich, jugaban a eso de muñeco a tierra, y el partido era solo eso, ver al rival y voltearlo. Fútbol muy poco, por lo que vale arrancar con la escalada en velocidad de Abel Simoes por izquierda a poco de iniciado el encuentro, toque a Matus que ingresa por ese lado dentro de área, la cruza ante la salida de Martínez y la pelota pasa a centímetros del caño izquierdo de Eduardo. Dos minutos más tarde otra escala por el lado zurdo del ataque albiverde, centro al corazón del área, y en la pelotera Muñoz de punta y para arriba aleja el peligro de su arco.
Y salvo algún tiro libre, generalmente por izquierda a manos de Maxi Chávez, Boxing no generaba juego en ataque. Julián Ojeda prácticamente no fue tenido en cuenta en casi toda la primera etapa por lo que Juli, tuvo que buscar el juego, primero apareció en la posición de Matus, y después se volcó casi como un puntero izquierdo, pero siempre lejos de la zona caliente. Boca?? Poco, muy poco, El despliegue siempre al servicio del xeneize por parte de Lucas Ceballos, el batallar mencionado de Sandoval y Márquez en un duelo particular con Medina, y como Claudio ganaba y perdía por ese lado, cambió de rumbo y lo fue a buscar a Leandro Fernández cerca de la banda y le hizo cirugía menor, que Eduardo Lugo solo arregló con un “sana sana colita de rana”. Cuando a esta altura Tanto Medina, como Sandoval habían ganado por licitación una tarjeta amarilla que Don Eduardo se empecinaba en no sacar. Y la “vendetta” quiso ser de Lucas por el honor de los Fernández y sobre cartón en la jugada siguiente salió a buscar al tucumano muy lejos, y para colmo falló en su intento de “justicia”.. “Y ya que estamos” pensó Lucas que pase el que sigue, y Simoes que era el que seguía, vuela por el aire. Falta, de eso no caben dudas, espero al menos ahora sí la primer amarilla del partido, pero me sorprende Don Eduardo con una roja directa a Lucas Fernández, que deja a Boca con diez y falta un toco de minutos por jugar.Pero el tiempo transcurre y Boxing no sabe aprovechar la diferencia numérica, es más ni siquiera se ha notado, Rapalín bajó unos metros a Diego Sandoval, corrió un poco a Jorge Olguín para dejarlo “stand by” de seis y tres al mismo tiempo y chau pinela. Minuto treinta y cinco, Boca en ataque, desborde de Manchafico por derecha centro de Víctor, pasado al segundo palo, El “tigre” la baja de cabeza para que Leandro Fernández casi como nueve y dentro del área, de zurda le pegue mordida para que Maxi Gómez impida el primer grito de gol boquense.
Tres minutos más tarde, centro desde la derecha de Leandro, al segundo palo, por allí aparece Carlos Muñoz, el central se eleva y mete un frentazo que Gómez se vuelve a lucir en la atajada, pero mis vista clavada en el salto del número dos boquense, me hace perder la previa, cuando Eduardo Lugo, pita y marca pena máxima. Penal para Boca, que personalmente no veo, pero que mi amigo Beto al lado mío, me confirma un evidente agarrón de la camiseta al “tigre” Rodríguez, también me aclara “Son de esos penales que no se cobran nunca…” Pero bueno, si lo cobra es porque está en el reglamento. Alguien me apunta como para que lo escuche..”
Esto es para compensar la expulsión de Lucas Fernández”.Cosa juzgada, porque Leandro Fernández, de zurda a media altura y a la izquierda, pone en ventaja al xeneize uno a cero. Pienso..Merecido?? No, por lo hecho por uno y otro hasta acá, el cero a cero le quedaba “pintado” al partido. Pero goles son amores, y Boca se aferra a ese amor que le da la ventaja minima con la que se va al descanso.
Cambio de pilcha para el tridente arbitral, ningún cambio en el arranque para los equipos. Mueve Boca y arranca la última parte del encuentro. Y si bien como decíamos no hay cambios ordenados desde los bancos, si se ve un cambio de actitud por el lado de Boxing, ahora el albiverde se planta decidido en campo rival, y ahora tiene a Mario Triviño enarbolando la bandera del ataque visitante. Abel Simoes se muestra como salida clara por izquierda, y Claudio Medina empieza a ganar casi todas en la zona media, Jancich por derecha empieza a alimentar el juego para Julián Ojeda y Maxi Chávez recorre la zona central de izquierda a derecha. Matus va de nueve hacia la izquierda y ahora Boxing, sin ser apabullante ni muchos menos, juega más en ataque, Boca ha perdido el medio campo, Flavio Márquez pierde más de las que gana y se nota que extraña a Sandoval, que está atrincherado cerca de Muñoz y Olguín, y es en esos minutos donde Boxing, tuvo dos chances clarísimas de igualar el encuentro, primero en un descomunal tiro de Matus, que hizo revolcar a Martínez para mandarla al corner sobre su izquierda, cuando todas las radios ya preparaban las gargantas en grito sublime de gol. Pero Eduardo movía su dedo enguantado en clara señal de negación.
Pasaron un puñado de minutos para que Maxi Chávez, sacara un sablazo de su pie derecho, que el “bocón” Martínez volvía a impedir, esta vez con sus dos manos, mandaba la pelota por sobre el horizontal, demostrando que no de “casuela” lleva su arco en cero tantos minutos y tantos partidos. Visto esto Don Santiago, acierta en el cambio, saca al “Tigre” Rodríguez, manda a Damián Barrionuevo al campo y decide de esta forma que Diego Sandoval vuelva como doble cinco junto a Márquez. “Donde te habías metido” fue la pregunta de Flavio al ver a su capitán otra vez en cercanías suya, y ahí Boca volvió a equiparar la mitad de la cancha y por lógica el partido. Minuto treinta y uno, Boca en ataque, por izquierda, ya está Becerra en campo, juega cerca del área con Fernández, toque de vuelta para Raúl, le vuelve a caer al once xeneize, esta fuera del área volcado por izquierda, prepara la zurda para enviar el centro, sobre la marcha cambia de idea, y de su pie zurdo, la acomoda para su derecha, parte interna, a media altura, la pelota se eleva, lleva potencia y dirección clara: La red. Maxi Gómez se esfuerza en el salto pero es imposible parar la caprichosa, que se coquetea zambullida en la red en un grito de todo Boca por el golazo consumado. Leandro de rodillas y con las manos hacia el cielo, espera al malón de compañeros que van en busca del festejo. Quienes van en busca, pero en este caso de la asistente Mariela Puche, son los jugadores de Boxing, reclamando offside de Becerra en la jugada previa.
Lugo convalida, y desde el banco albiverde, siguen los reclamos. Don Eduardo, expulsa al DT boxinguista. Igual suerte corre el DT de Boca, todo muy confuso para mí y más a la distancia en que estoy. Solo los protagonistas sabrán a ciencia cierta que sucedió.
Y allí Boxing se quebró anímicamente, siguió intentando, al menos para achicar la diferencia en el marcador, pero se encontraba una y otra vez con una sólida defensa, donde Carlos Muñoz sacaba absolutamente todas. Por el lado del albiverde, Richard Bazán se había convertido durante todo el partido, en la máxima figura de la visita. Enorme la labor del central y capitán albiverde, sumado a que jamás, léase bien..Jamás apeló al juego brusco, no lo necesita, le sobra paño con la calidad que tiene.
El resultado le permite tirar un caño a Manchafico, que Cormack, le agradece con un certero golpe, para que Eduardo Lugo le muestre la segunda tarjeta del mismo color, que obliga a canjear por roja, Juan Carlos, saluda correctamente al arbitro y se va, como corresponde, sin discutir.
Cuarto minuto de descuento, se muere el partido, corner desde la derecha, lo toma Leandro y su zurda, pasado, segundo palo, van sobre la marca de Becerra, y queda solo Sandoval como último hombre, frentazo en busca de una segunda cabeza y la que aparece en escena es la de Carlos Muñoz, para estampar el tres a cero. El pitazo de Lugo, marcaba el final para un tres a cero que eleva a trece puntos en la tabla a Boca y que dictamina que Boxing se queda fuera del Argentino.
Boxing ha tenido, y no hace tanto en el tiempo, tardes de gloria, festejos y sonrisas.
Con estos mismos muchachos y con la misma dirigencia dentro del campo. Carlos Gargaglione, antes del inicio del torneo dijo ”Nos preparamos para comer caviar, pero sabemos que podemos terminar comiendo sándwich de mortadela” Ojalá por el bien de Boxing y del fútbol mismo Don Carlos no de un paso al costado. Boca sigue de festejo, Boca ya está en la otra fase y es por merito propio, que no quepan dudas de eso, si bien el camino es largo y falta mucho por recorrer, Boca sabe lo que quiere…sabe a donde va.
Cambio de pilcha para el tridente arbitral, ningún cambio en el arranque para los equipos. Mueve Boca y arranca la última parte del encuentro. Y si bien como decíamos no hay cambios ordenados desde los bancos, si se ve un cambio de actitud por el lado de Boxing, ahora el albiverde se planta decidido en campo rival, y ahora tiene a Mario Triviño enarbolando la bandera del ataque visitante. Abel Simoes se muestra como salida clara por izquierda, y Claudio Medina empieza a ganar casi todas en la zona media, Jancich por derecha empieza a alimentar el juego para Julián Ojeda y Maxi Chávez recorre la zona central de izquierda a derecha. Matus va de nueve hacia la izquierda y ahora Boxing, sin ser apabullante ni muchos menos, juega más en ataque, Boca ha perdido el medio campo, Flavio Márquez pierde más de las que gana y se nota que extraña a Sandoval, que está atrincherado cerca de Muñoz y Olguín, y es en esos minutos donde Boxing, tuvo dos chances clarísimas de igualar el encuentro, primero en un descomunal tiro de Matus, que hizo revolcar a Martínez para mandarla al corner sobre su izquierda, cuando todas las radios ya preparaban las gargantas en grito sublime de gol. Pero Eduardo movía su dedo enguantado en clara señal de negación.
Pasaron un puñado de minutos para que Maxi Chávez, sacara un sablazo de su pie derecho, que el “bocón” Martínez volvía a impedir, esta vez con sus dos manos, mandaba la pelota por sobre el horizontal, demostrando que no de “casuela” lleva su arco en cero tantos minutos y tantos partidos. Visto esto Don Santiago, acierta en el cambio, saca al “Tigre” Rodríguez, manda a Damián Barrionuevo al campo y decide de esta forma que Diego Sandoval vuelva como doble cinco junto a Márquez. “Donde te habías metido” fue la pregunta de Flavio al ver a su capitán otra vez en cercanías suya, y ahí Boca volvió a equiparar la mitad de la cancha y por lógica el partido. Minuto treinta y uno, Boca en ataque, por izquierda, ya está Becerra en campo, juega cerca del área con Fernández, toque de vuelta para Raúl, le vuelve a caer al once xeneize, esta fuera del área volcado por izquierda, prepara la zurda para enviar el centro, sobre la marcha cambia de idea, y de su pie zurdo, la acomoda para su derecha, parte interna, a media altura, la pelota se eleva, lleva potencia y dirección clara: La red. Maxi Gómez se esfuerza en el salto pero es imposible parar la caprichosa, que se coquetea zambullida en la red en un grito de todo Boca por el golazo consumado. Leandro de rodillas y con las manos hacia el cielo, espera al malón de compañeros que van en busca del festejo. Quienes van en busca, pero en este caso de la asistente Mariela Puche, son los jugadores de Boxing, reclamando offside de Becerra en la jugada previa.Lugo convalida, y desde el banco albiverde, siguen los reclamos. Don Eduardo, expulsa al DT boxinguista. Igual suerte corre el DT de Boca, todo muy confuso para mí y más a la distancia en que estoy. Solo los protagonistas sabrán a ciencia cierta que sucedió.
Y allí Boxing se quebró anímicamente, siguió intentando, al menos para achicar la diferencia en el marcador, pero se encontraba una y otra vez con una sólida defensa, donde Carlos Muñoz sacaba absolutamente todas. Por el lado del albiverde, Richard Bazán se había convertido durante todo el partido, en la máxima figura de la visita. Enorme la labor del central y capitán albiverde, sumado a que jamás, léase bien..Jamás apeló al juego brusco, no lo necesita, le sobra paño con la calidad que tiene.
El resultado le permite tirar un caño a Manchafico, que Cormack, le agradece con un certero golpe, para que Eduardo Lugo le muestre la segunda tarjeta del mismo color, que obliga a canjear por roja, Juan Carlos, saluda correctamente al arbitro y se va, como corresponde, sin discutir.
Cuarto minuto de descuento, se muere el partido, corner desde la derecha, lo toma Leandro y su zurda, pasado, segundo palo, van sobre la marca de Becerra, y queda solo Sandoval como último hombre, frentazo en busca de una segunda cabeza y la que aparece en escena es la de Carlos Muñoz, para estampar el tres a cero. El pitazo de Lugo, marcaba el final para un tres a cero que eleva a trece puntos en la tabla a Boca y que dictamina que Boxing se queda fuera del Argentino.
Boxing ha tenido, y no hace tanto en el tiempo, tardes de gloria, festejos y sonrisas.
Con estos mismos muchachos y con la misma dirigencia dentro del campo. Carlos Gargaglione, antes del inicio del torneo dijo ”Nos preparamos para comer caviar, pero sabemos que podemos terminar comiendo sándwich de mortadela” Ojalá por el bien de Boxing y del fútbol mismo Don Carlos no de un paso al costado. Boca sigue de festejo, Boca ya está en la otra fase y es por merito propio, que no quepan dudas de eso, si bien el camino es largo y falta mucho por recorrer, Boca sabe lo que quiere…sabe a donde va.