03 mayo 2010

No sos vos … soy yo

LIGA DE RIO GALLEGOS
Petrolero volvió a sumar de a tres, esta vez ante Independiente venciéndolo por tres a cero. Matías Insúa en dos ocasiones y Alexis Riquelme, todos en la complementaria, sellaron la suerte de un diablo, que con un hombre de más en la mayor parte del encuentro, nunca le encontró la vuelta a un planteo bien enseñado y mejor aprendido del albirojo de Nicolai.
Texto: Alfredo Galvez. Fotos: LQ.

Primer turno en Defensores del Carmen, para un encuentro que uno cree de antemano, pinta pá bueno. Petrolero que fuera goleado en el arranque del torneo, supo redimirse y encontró ante Vial en la segunda fecha un triunfo que lo pone expectante en la tabla. Del otro lado Independiente, que aun no sabe de derrotas, empate de visita ante Boxing en dos y triunfo ante Unión para sumar cuatro puntos que lo poner al frente de la zona “B” junto a Boxing.
Nicolai intenta mantener un equipo con pocos cambios fecha tras fecha, por lo que debe solamente modificar a quien ocupe los tres palos del albirojo. Confirmado esto salta al campo con Gustavo González en la valla, los cuatro del fondo para Andrés Gironi, Eduardo Loncón, Pablo Hernández y Carlos Gironi. Los del medio son Nico López, Luis Bazán, Paco Sandoval y Cristian Bazán. Dejando las chances goleadoras para Matías Insua y el “Toti” Juan Oyarzo.
Independiente llega al Defensores con Maxi Gómez en el arco., Leandro Cárdenas, Matías Lisardo, Antonio Romero y Daniel Vidal en zona defensiva. Sergio Ripoll, Matías Bórquez y Claudio Ledesma. Unos metros más arriba Lucas Benítez y en ataque Miguel Sánchez y el “Tigre” Rodríguez. Con el pitazo de Omar Lugo, minutos pasados de las trece treinta la caprichosa comenzaba a rodar por el sintético del “Defe”.
Y fue desde el inicio mismo del partido Independiente quien tomó la posta de buscar terreno adversario. Ripoll apareciendo por derecha, por izquierda su capitán, Claudio Ledesma y desde el medio bien prolijo aparecía Matías Bórquez para hilvanar el juego rojo. Pero si bien el juego y la pelota eran de Independiente, Carlos Rodríguez, la carta de gol del rojo, era absorbido por la marca de Loncón y Hernández, por lo que el diablo comenzó a repetirse en pelotazos en forma de centros que llovían de pelotas paradas tanto desde la derecha como desde el sector zurdo, teniendo en todas ellas como ejecutante a Matías Bórquez. Pero solo una llevó el riesgo de apertura cuando por la izquierda y con la cara interna de su botín derecho, Matías revienta el horizontal y el rebote no es capitalizado por ningún “Diablo”. Luego un cabezazo del “Tigre” intentando sorprender por arriba de la salida de González, pero encontró a Gustavo, “avivándose” rápidamente para dar un paso hacia atrás y quedarse en lo alto con la redonda. Petrolero, que comenzó “apurado” por el rojo, necesitó solo el tiempo para que Paco Sandoval y Cristian Bazán empezaran a juntarse por el medio, Luis Bazán era el auxilio exacto para ambos, porque Luis se corría todo por la franja central. Pero el albirojo carecía de profundidad en los últimos veinte metros, con Oyarzo más retrasado, solamente Insúa quedaba contra el mar de casacas rojas en cada ataque de Petro. Sinembargo, Matías se las ingeniaba a pura gambeta y velocidad complicar al cuarteto defensivo de Independiente. Pero llegan malas noticias para los “Boys” del Indio Nicolai, cuando sobre los veinte, un codazo de Andrés Gironi, que no llega a destino “por esto..mire” da para que Don Lugo le muestre la roja directa al marcador lateral derecho, en una correcta e indiscutible sanción disciplinaria. Luis Bazán y Nico López debieron turnarse para ocupar ese hueco, el Toti bajó aún más para dar una mano a los del medio y Matías Insua, pidió al banco un antifaz y se convirtió en el llanero solitario en el ataque de Petro. Don Omar Lugo pitaba el final al minuto cuarenta y seis y se iba a camarines hasta como fastidioso por tantas tarjetas que tuvo que sacar, pero discutidor como soy, a mi me daba hasta impotencia no poder discutirle ninguna, porque créame todas, absolutamente todas habían sido justificadas.
Mientras dibujaba en mi cabeza lo que vendría, supe imaginariamente poner a un Petro recluido en su campo y a un Independiente, a sabiendas de la diferencia numérica, desbordando y martillando por todos los sectores… Pero el Indio, en camarines no solo cambió la “cabezas” de sus dirigidos, sino que hizo además que las matemáticas no me cerraran… Porque los menos fueron más y los más fueron menos… ¿Qué como es eso?.. Simple, Petrolero salió a buscar el partido ni bien Lugo marcó el arranque de la etapa. Los Bazán, comenzaron a llevar a su equipo en dirección de Gómez, Cristian en la conducción por izquierda, Luis apoyando el buen andar de Paco Sandoval y Matías Insua comenzó a lastimar, porque sus piques y gambetas fueron algo que el rojo no pudo encontrarle la vuelta nunca en la segunda. Loncón y Hernández se afirmaron aún más en defensa y el Tigre sufrió un “bloqueo” defensivo que nunca pudo vulnerar. Superado Matías Bórquez en el medio el rojo, perdió el rumbo del partido. Y de una contra desperdiciada nace una contra aprovechada. Lo pierde Independiente cuando la contra para Sánchez encuentra a un atento González que debe abandonar su arco para impedir que Miguel se haga de la pelota y le facture. Y de allí nace la contra para que desde los pies de Sandoval, salga desde más de treinta metros el pase profundo y exacto para Insúa que ya capturó la pelota por derecha y va con rumbo al corazón del área mayor, la salida de Gómez es simplemente para que Matías la ponga con su verde botín diestro al palo zurdo de Maxi para cantar que Petro vence uno a cero a Independiente. Y el partido se abrió. Independiente con Saucedo en campo, mostraba por derecha de su ataque las mejores explosiones, pero los centros llegaban a las cabezas de Hernández o Loncón o en su defecto a las manos o puños de González. Más agrande para Gustavo, cuando casi a quemarropa un cabezazo rojo busca nido de red, pero González en una pirueta tan rara como eficaz, manotea por sobre el horizontal.
A esta altura del partido, Insua se estacionó por derecha y cada pelota para el ex Boca, le dolía en demasía al diablo. Justamente Matías, en una tarde soñada, de derecha, al palo más lejano de Gómez facturaba el segundo de su cuenta y por ende, el segundo de Petrolero. Ahí Independiente se quebró. Bórquez y Rodríguez fueron quienes más sintieron el impacto y se convirtieron en fantasmas deambulando por el Defensores, casi sin convicción. Ni que decir cuando el recién ingresado Riquelme encuentra un centro desde la derecha para elevarse por los aires y en un raro dibujo de pierna derecha la “cuelga” por sobre Maxi, para cantar tricota para el albirojo. Un mazazo al corazón de Independiente, que siguió yendo, casi casi por inercia, pero denotaba en su juego que al menos hoy resultaría imposible doblegar a González. ¿¿Se le podía achacar algo a este Independiente?? No indudablemente no, quiso pero no pudo, intentó pero no llegó, buscó pero no encontró. Del otro lado Petrolero, explicando que los menos a veces son más. Con el silbato final de Omar Lugo, Petrolero parecía querer decirle a Independiente… Tranquilo Diablo que… NO SOS VOS…SOY YO